La 125 A se vendió mucho entre 1949 y 1952, lo cual permitió encarar inversiones destinadas al desarrollo de nuevos modelos. Su primera moto fue la 125 A, una 2T de 125 cm³, algo muy común entre los fabricantes españoles de la época. El nombre responde al acrónimo de Orpheo Sincronic Sociedad Anónima, que era el nombre de una compañía que en los años 20 del siglo XX empezó a fabricar proyectores cinematográficos y motores fuera borda diseñados por Ricardo Soriano.
