Es un homenaje a los dos oceános que bañan Sudáfrica, el Atlántico y el Índico. Habría que empezar por fusionar ambas confederaciones en una, para luego hacer las consecuentes fusiones: una competición única por naciones, una Champions League para todo el continente americano, y luego el tema de las fases de clasificación. Si bien no se precisa a cuánto puede ascender el retorno a través de estas inversiones, las administraciones tratan de dar un sentido y recorrido a sus patrocinios.