Sin embargo, los derechos de la mujer en Afganistán se han visto reducidos prácticamente a la nada desde que las tropas norteamericanas salieron del país, dejando éste en manos de los talibán. Los hechos, que sucedieron el 16 de septiembre de este año, provocaron una gran oleada de altercados, -una nueva primavera árabe, podríamos decir- que se extendieron desde Teherán a todo el país, y en los que fueron habituales, incluso, mujeres que se quitaban el velo y lo quemaban públicamente, a la vista de los policías y de las autoridades.