El portero Gilmar recibió el número 3, Garrincha y Zagallo usaron el número de wing contrario al que les correspondía respectivamente, 11 y 7, mientras que Pelé recibió por azar el número 10, por lo cual dicho número se volvería famoso. En el Mundial de 1990, en Escocia se asignaron números de camiseta de acuerdo al número de partidos internacionales que cada jugador había jugado hasta ese momento (con la excepción del portero Jim Leighton, al que se le asignó fuera de secuencia el número 1): Alex McLeish, que era el jugador con más participaciones, obtuvo el número 2, mientras que Robert Fleck y Bryan Gunn, que solo tenían una participación cada uno, obtuvieron los números 21 y 22, respectivamente.