Y no os ríais tanto que esas camisas nos las hemos puesto todos, y si no vosotros directamente, sí os las compraban vuestras mamás en El Corte Inglés… Lo que nunca entendere son las que se ponen esos escotes y despues se van tirandose para arriba y poniendose la mano para que no se le vea nada. La diferencia es que tu interlocutor no está de espaldas y, sí amigos, se da cuenta.